El aprendizaje es un camino que se inicia desde el mismo momento en que nacemos, cuando somos bebés.

 

Desde el punto de vista del lenguaje, primero emitimos sonidos, luego silabeos y palabras. Poco a poco empezamos a expresar ideas mediante frases sencillas hasta que conseguimos expresarnos de forma clara a través del lenguaje.

Una vez que dominamos los mecanismos básicos del lenguaje oral, se inicia otro gran reto: aprender a leer y escribir. En el Colegio Ayalde, el aprendizaje de la lectura y la escritura se hace de forma paulatina a partir de los tres años, pero respetando la madurez del niño y teniendo en cuenta que cada uno tiene su propio ritmo de aprendizaje. No se debe olvidar que para poder aprender a leer y escribir, antes se deben haber conseguido una serie de prerrequisitos que se trabajan a lo largo del infantil, como son: un buen nivel de lenguaje oral, un desarrollo de la lateralidad, un desarrollo adecuado del esquema corporal, una coordinación de movimientos adecuada, etc.

 

Desde 1º de Educación Infantil los niños realizan actividades que les ayudan y acercan al maravilloso mundo de la lectura. Las aulas están llenas de carteles en los que aparecen escritos los nombres de las cosas que les rodean. Se les presentan a los niños colecciones de palabras con sus propios nombres, palabras de cosas relacionadas con el tema,…, de forma que se familiarizan con esos nombres, observando su longitud, la letra por la que empiezan, etc. Además, todos los días se les presenta el abecedario de forma fonética-gestual, lo que les ayuda a reconocer esas letras y sonidos en las palabras que tienen a su alrededor. Es durante este curso cuando los niños aprenden los fonemas vocálicos.

 

Un soporte muy importante a la hora de trabajar la lecto-escritura es el método “Letrilandia”. Su característica fundamental reside en la idea de convertir las letras en personajes de un mundo imaginario y en utilizar la fantasía de los cuentos y de las canciones como elemento motivador. A lo largo de todo el infantil se les van presentando a los niños todos los personajes del “País de las letras”, en el que cada fonema va unido a un gesto y a un sonido.

 

Todo este proceso lector está acompañado de muchas actividades de los proyectos de comprensión que fomentan y refuerzan la lecto-escritura. De tal forma, que al terminar 3º de EI, los niños consiguen leer todos los fonemas, lo que les permite estar capacitados para ir avanzando en la lectura comprensiva.