Este último trimestre, los niños de 1º de Educación Infantil han trabajado un cuento llamado “Un duende en una maceta”. En él se relata la historia de dos niños, Daniel y Elena, que un buen día mientras riegan la maceta de clase se encuentran un duende y no se lo pueden contar al resto de sus compañeros, ya que es un secreto.

Aprovechando dicho cuento, a las profesoras se les ocurrió buscar a su propio duende por la clase, por lo que un día le dejaron una nota encima de la mesa, para ver si la recibía. Por supuesto, ¡obtuvieron respuesta! Éste les contó que su trabajo era vigilar y cuidar de la clase cuando ellos no estuvieran.

Los niños se pusieron muy contentos al saber que también ellos tenían un duende en su clase. Le pusieron un nombre que eligieron entre todos por votación y le hicieron una casita para que pudiera pasar las noches mejor. Todos los días le fueron dejando un paquete de galletas para que se alimentara. El duende en compensación les entregaba una notita acompañada de algún dibujo, libro o juguete para que se divirtieran. Pero, ¡shhhhh! ¡No se lo podéis contar a nadie que es un secreto!