Con motivo de una salida cultural, las alumnas de Ciencias Sociales de 1º de Bachillerato fuimos a un tribunal de justicia para estudiar el proceso de un juicio. No solo ha sido interesante de por sí, sino también ha animado a las estudiantes interesadas en graduarse en Derecho.
Al llegar al ministerio de justicia, nos han dirigido a una sala de juicios, en la que se encontraban la jueza y la fiscal. Nos han dado una breve explicación sobre el mecanismo judicial, contando el procedimiento en caso de suspensión del juicio o si alguno de los testigos no acudía al mismo. En total asistimos a cuatro juicios: uno suspendido porque el acusado no compareció, en el que vimos puesto en práctica lo que nos habían explicado previamente.
En uno de los juicios, un caso de robo, el acusado sí acudió, y asistimos al diálogo entre la abogada y la fiscal. Fue impresionante la forma que tuvieron de defender sus respectivas posturas, dividiendo nuestra opinión sobre si el delito era grave o leve. Esto causó un posterior
debate entre nosotras, suscitando un gran interés.
También aprendimos sobre las etapas del proceso, y cómo se le hacían preguntas al acusado y a los testigos, quienes aportaban diferentes puntos de vista que a veces se contradecían. Nos asombró la capacidad de los abogados, la jueza y la fiscal de mantenerse serenos frente al enunciado de los supuestos delitos y de las declaraciones, y la facilidad que tenían a la hora de relacionar los hechos con el código penal.
A algunas nos impactó cómo la fiscal rebatía a los abogados con tanta exactitud y habilidad, sobre todo en uno de los casos, en el que su forma de expresarse le aseguró el juicio.
En conclusión, esta experiencia ha sido inolvidable y muy didáctica; no sólo para las estudiantes de Derecho sino para las demás, ya que tuvimos la oportunidad de conocer los métodos y formas de actuación de la justicia.
Mariana de Andrés y Lucía Ferrer