Como cada año, la última semana de enero ha acogido la Semana Interdisciplinar, un proyecto propio del colegio donde se trabaja, de forma monográfica, una temática utilizando las Inteligencias Múltiples de Howard Gardner. En esta ocasión, el hilo conductor era la encíclica Fratelli Tutti y la forma de vida que propone el Papa Francisco, que amemos al otro como hermano, aunque esté lejos. Es decir, un llamamiento a la solidaridad, responsabilidad y a la esperanza.

Así pues, bajo el título “Razones para la esperanza en un mundo incierto”, todo el alumnado abrió, de una u otra manera, una nueva ventana que permita reconocer y valorar a cada persona más allá de la cercanía física, tan limitada en estos momentos. De esta forma, surgieron en el centro distintas iniciativas con las que aprender la importancia del diálogo, la fraternidad o el perdón. Algo que plasmaron a través de diversos medios y soportes e incluso, en la asignatura de Arte de 1º de Bachillerato, un “Spotify Glass” el que reunieron una imagen y una canción para la esperanza.

En este contexto, emerge, a su vez,  un proyecto de hermanamiento entre las alumnas de 2º de Bachillerato y las de 1º de Primaria. El objetivo del mismo, que no se reduce solo a la Semana Interdisciplinar, es que que las alumnas de los diferentes niveles se conozcan, establezcan “lazos de amistad”, compartan actividades y se responsabilicen, en alguna medida, las unas de las otras, aprendiendo mutuamente. Una iniciativa con la que se busca educar en valores, la tolerancia y la solidaridad, incidiendo en la inteligencia emocional y diseñando situaciones de aprendizaje y convivencia.

Para ello, después de la presentación, el primer contacto e inventarse un saludo, se les ha propuesto, entre otras actividades, realizar en parejas, formada cada una por una alumna mayor y una pequeña, un microrrelato e ilustrarlo, y buscar en común las palabras adecuadas para decir mucho con poco.