El pasado viernes, 13 de octubre, la profesora de infantil Janire Rementeria acudió a un curso de estimulación temprana en el centro BRISBANE impartido por Rosina Uriarte.

En esta formación se explica que la estimulación temprana es el conjunto de actividades estructuradas, ordenadas y organizadas que se realizan con el objetivo de favorecer y apoyar el desarrollo y crear un amplio abanico de intereses en el niño.

La estimulación temprana ha de ser un regalo para crear nuevas conexiones neurológicas en el cerebro de las que el niño pueda favorecerse el resto de su vida.

Otro de los aspectos importantes de los que se habla en la formación es el del desarrollo del cerebro, el que alcanza su nivel de desarrollo neuronal óptimo hasta los tres años, decreciendo hasta los seis y a partir de los cuales, los niños aprenden a partir de las habilidades adquiridas hasta esta edad.

A la hora de desarrollar la metodología de la estimulación temprana hay tres puntos fundamentales a tener en cuenta: no hay desarrollo sin estímulo, el estímulo crece con la repetición y el desarrollo óptimo se consigue con estímulos óptimos. Por ello, una estimulación adecuada debe ser adecuada al desarrollo del niño: intensa, breve, rápida, repetitiva y continua.

Los estímulos se reciben por los sentidos, por lo tanto debemos estimular todos los sentidos más allá de los bits de inteligencia o los conocimientos enciclopédicos, dando especial importancia al desarrollo motor del niño.

La formación aporta también materiales y programas específicos para llevar a cabo en el aula.